divendres, 13 de juny del 2008

Polèmica amb les "miembras"

Sorpren la polèmica sobre la utilització de la paraula "miembras" en el Congres. Perquè no és excepcional que es facin servir paraules importades d'altres idiomes, com l'ànglès, sense que siguin motiu de notícia, encara que no estiguin reconegudes formalment al diccionari. Per si dona llum a la "polèmica" ja que el tema és recurrent, es reprodueix a continuació un extracte de l'article de La Vanguardia de 30 novembre 2006, "La Academia tiene sexo" Cuando Angela Merkel fue elegida, recuerda Lledó, la RAE se apresuró a sacar una nota en su web sobre el femenino de canciller en la que concluía que canciller era de género común y por lo tanto era suficiente con decir la canciller. “Sólo el enunciado ya era un despropósito", afirma Lledó. "Venía a decir que el masculino existe y, como si de la costilla de Adán se tratara, se crea luego un femenino. Lingüísticamente, lo que hay es una raíz a partir de la cual se forman el masculino y el femenino. Además, es obvio que en determinados oficios surgió antes el femenino que el masculino, como hilandera o costurera..., "Recuerdo que cuando hubo elecciones al Parlament en 1980 nos espetaban, como si nos hubieran pillado en falta: ‘¿qué querréis? ¿que las llamemos diputadas?’, como si fuera un imposible". Molt reconamable també l'article publicat el mateix dia a El País "La cancillera i el azafato"